Al igual que en medicina humana, la palabra hematuria en sí misma hace referencia a la presencia de sangre en la orina. Suele indicar patologías de los sistemas genito-urinario.
A continuación, descubriremos por qué puede producirse, así como los síntomas que puede acompañarla y el tratamiento que conlleva. Vamos a ello.
¿Qué es la Hematuria?
La hematuria no es una patología en sí misma, si no un síntoma o signo el cual hace referencia a la presencia de sangre en la orina. Como antes hemos comentado, nos suele indicar algún problema asociado a una enfermedad de tracto urinario o genital. Este sistema comprenderá el aparato genital, los riñones, uréteres, vejiga urinaria y uretra en sus varias porciones.
Rara vez será una condición que ponga en riesgo la vida de nuestro animal. Solamente en casos muy severos como por ejemplo traumatismos por atropellos o las de origen renal que conduzcan a un shock, serán peligrosas para la vida del mismo.
Principales causas de Hematuria
Hay un amplio rango de causas o patologías que pueden ocasionar este signo. Algunas de estas son:
- Cálculos. Pueden estar producidos por cristales de varios tipos en los riñones, uréteres, vejiga o uretra. Aunque según mi experiencia clínica veterinaria profesional tienden a localizarse más en vejiga y en la uretra.
Hay predisposición racial como en los dálmatas con la presencia de cálculos de urato amónico. Pero los que se dan con más incidencia son los cálculos de estruvita y oxalato cálcico. Los cálculos suelen acompañarse con dolor al orinar. Algunos de estos cálculos simplemente se disuelven con dieta, otros requieren intervención quirúrgica. - Tumores vesicales. Serán masas que debido a su localización pueden hacer que la pared de la vejiga sangre y esta se observe en la orina.
- Traumatismos: por ejemplo por atropellos de coche pueden producirse lesiones en el tracto urinario y como consecuencia la sangre salga al exterior mediante la orina.
- Patologías prostáticas: se originan en perros no castrados. La inflamación de la próstata puede dar lugar a dolor y hematuria, entre otros síntomas que más abajo describiremos.
- Cistitis. Es la inflamación de la pared de la vejiga. Al igual que en los humanos, una cistitis grave puede ocasionar hematuria en nuestra mascota.
- Enfermedades infecciosas como enfermedad de Lyme o leptospirosis.
- Coagulopatías como coagulación intravascular diseminada, hemofilia, intoxicación por raticidas, trombocitopenia o nivel bajo de plaquetas.
¿Cómo saber si un perro tiene Hematuria? Síntomas
Como la hematuria indica, el signo o síntoma principal será presencia de mayor o menor sangre en la orina. Esta puede aparecer desde en forma de coágulos hasta disuelta en la orina de forma abundante y uniforme. Así como en una amplia gama de colores desde rosácea, marrón, hasta rojiza.
Normalmente esta se acompaña de dolor en la micción o al presionar externamente la vejiga, así como dolor abdominal caudal posiblemente expresado mediante posiciones anormales.
Podrán orinar y beber más agua de lo normal.
Diagnóstico
Primeramente, el veterinario se hará una idea del caso mediante una anamnesis o historia clínica de nuestra mascota. Seguido de esto, explorará física y generalmente al animal para hacerse una primera idea de lo grave que es la situación.
Los resultados de la anamnesis y el examen físico a menudo ayudan a localizar la enfermedad en el tracto urinario (superior o inferior), pero como en muchas patologías, se requerirá de pruebas complementarias.
Como normal general, la hematuria al principio de la micción suele relacionarse con problemas en vías genitales y uretra (más cercano al orificio de salida). En cambio, al final de la micción la hematuria puede relacionarse con problemas en la vejiga.
Se necesitará un análisis de dicha orina (o urianálisis) para determinar si se trata de una cistitis. Lo ideal es que esto se realice por cistopunción (obtención de muestra de orina con una jeringa y aguja a través de la piel guiado por ecografía).
Esto se comprobará mediante una tira de orina donde posiblemente se podrá observar un pH básico (más de 7), presencia de leucocitos, etc. Mediante un refractómetro podrá evaluarse la densidad urinaria. En perros deberá ser de entre 1015-1045. El centrifugado de la orina y posterior análisis del sedimento será útil para observar la posible presencia de cristales en la orina.
Mediante una radiografía abdominal el veterinario podrá ver el tamaño de la próstata y observar si tenemos cálculos en vejiga, riñones, uretra…
Una ecografía abdominal será bastante diagnóstica para observar cálculos no visibles por radiografía, la morfología renal, prostática, uretral, vesical…
¿Cuál es el tratamiento para la Hematuria?
Se debe evaluar la hematuria para determinar el origen del sangrado y la causa subyacente, de modo que se pueda recomendar el tratamiento adecuado.
Si la causa es un traumatismo y hay algún órgano fragmentado, será posible que se tenga que intervenir quirúrgicamente, generalmente al igual que con los tumores.
En caso de cálculos, dependerá del tamaño y la localización. Algunos de estos pueden disolverse con fluidoterapia y dieta. Otros necesitarán como en el caso anterior extraerlos mediante cirugía. Puede ser necesario el sondaje uretral para mover los cálculos alojados en la uretra a la vejiga urinaria y de ahí extraerlos quirúrgicamente.
Si la hematuria es debido a una cistitis, el tratamiento irá destinado a tratar la infección con antibioterapia y antiinflamatorios como meloxicam.
Como se ve, no se podrá hacer un diagnóstico exacto en casa sin llevar a la mascota al centro veterinario. Por lo que si observas hematuria en tu peludo, lo mejor será pedir opinión de un profesional, el cual se dedica a ello.