Los perros babean en muchas ocasiones debido a la presencia de una hembra en celo o encontrarse frente a comida. Que un perro babee no es algo que deba preocuparnos si lo hace de forma asidua.
Sin embargo, cuando las babas están presentes en todo momento y se aprecian más síntomas, es posible que nos encontremos ante un problema de salud que requiera de atención veterinaria. Veamos los detalles.
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Ptialismo en perros
El ptialismo es el exceso de salivación cuando ocurre a raíz de un estímulo. Algunas razas caninas, como el gran danés o san bernardo (entre otros), presentan una mandíbula propensa a un babeo constante. En este caso, no debes preocuparte.
Si tu perro no pertenece a estas razas y comienza a babear de repente, necesitas conocer las razones para acudir al veterinario y encontrar la solución. Así como si pertenece a estas razas pero en un momento determinado empieza a babear en exceso. Estos son las principales situaciones y los motivos para que un perro babee mucho.
Mi perro babea mucho por emociones
Puede pasar que nuestra mascota babee mucho al estar excitado sexualmente con una hembra o con algún objeto/miembro de la familia. Este síntoma dentro de esa reacción es normal, al igual que por ejemplo al sufrir estrés en un viaje o mientras ve cómo le ponemos la comida. Por lo tanto, en situaciones momentáneas y que implican emociones, es normal.
Mi perro babea y tiene mal olor en la boca
La salivación excesiva puede producirse cuando existe algún problema en la cavidad bucal, como enfermedades o un objeto atascado. Las principales causas son:
- Gingivitis con más o menos placa de sarro.
- Estomatitis (inflamación oral) bacterianas o víricas.
- Tumores o pólipos.
- Diente roto.
- Objeto atascado en los dientes o encías.
Cuando el babeo viene acompañado de mal olor, son altas las probabilidades de que se deba a una enfermedad infecciosa. Debes acudir a tu veterinario de inmediato para iniciar un tratamiento, pues problemas de este tipo son peligrosos y dolorosos para tu perro.
En caso de que algo esté atrapado en sus dientes, puedes intentar retirarlo, pero con mucho cuidado. Recuerda que tu perro estará adolorido y podría morderte.
Cuando el origen del babeo está en la boca de tu perro, el dolor y la incomodidad le impedirán comer; además, el exceso de saliva lo deshidratará. Ambas cosas son un riesgo para la vida de tu mascota y requieren atención médica.
Mi perro babea y tiembla
La intoxicación es otra causa de que tu perro babee. Ocurre cuando el animal ha ingerido una sustancia tóxica o que le produce picor. Normalmente este babeo excesivo suele estar acompañado de vómitos y/o temblores.
Los signos de intoxicación dependen de la sustancia ingerida, así como de la cantidad. Aquí os exponemos varios sin centrarnos en un solo tóxico. Estos son:
- Vómitos y salivación excesiva.
- Desorientación.
- Rigidez en las extremidades.
- Temblores y nerviosismo.
- Arritmia cardíaca.
- Dificultad para respirar.
- Dilatación de las pupilas.
Como puedes ver, la atención médica debe ser inmediata. Además, no obligues a tu perro a beber leche o aceite si sospechas de envenenamiento, pues solo harás que los compuestos tóxicos sean absorbidos por su cuerpo a mayor velocidad. Acude al veterinario para que trate cada intoxicación como se debe.
Otras causas de salivación excesiva en perros
El babeo o salivación excesiva puede ser común en los perros en muchas situaciones. Estas son sus posibles causas:
- Contacto con ortigas. Esto puede hacer que nuestro animal comience a salivar mucho y a morder y lamer descontroladamente objetos con el fin de aliviar ese picor que tiene en la boca.
- Orugas procesionarias: pueden producir inflamación oral, edema de glotis con la consecuente salida de babas hacia el exterior.
- Náuseas: ya sean provocadas por una enfermedad o una indigestión, las náuseas pueden llevar a tu perro a babear.
- Uso de relajantes: ciertos medicamentos como los formulados para relajar al perro, en ocasiones pueden provocar salivación.
¿Cómo determinar la causa correctamente?
Solo el veterinario podrá decirte qué está ocasionando que tu perro babee en exceso, basado en un examen físico general y lo que puedas contarle sobre su estado anímico. Estos estudios incluyen una revisión de la boca y dientes, analíticas de sangre y orina, y otros que el especialista considere necesarios.
Las posible soluciones y tratamientos dependen de la causa. En todos los casos, es importante que prestes atención a los síntomas y acudas al veterinario lo más pronto posible.