La mejor edad para castrar a un perro
Incluso dentro del mundo veterinario existen muchas opiniones sobre cuál es la mejor edad para castrar a un perro, impidiendo que pueda generar descendencia y previniendo posibles enfermedades relacionadas.
Por ello, desde Soyunperro te vamos a explicar cuales son las ventajas y desventajas de castrar a tu perro con algunos meses de vida o con algunos años, para que valores por ti mismo y decidas cuando debes hacerlo.
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Índice
Ventajas de la castración en perros
No pretendemos animarte a que vayas corriendo a castrar a tu perro, simplemente te mostraremos las evidencias científicas descubiertas hasta el día de hoy, sobre las ventajas de castrar a un perro.
Dentro de las leyendas urbanas que circulan y de las falsas afirmaciones, destacan las que realmente son ciertas y, además, muy beneficiosas para nuestro perro. Vamos con ellas:
- Los perros castrados son más tranquilos, porque no generan testosterona. Al eliminar los testículos, eliminamos la única forma de generar testosterona en un macho. Por lo que en general, al eliminar la producción de esta, el animal tiende a estar más tranquilo, tirar menos en el paseo, o ser menos agresivo. Evidentemente influyen varios aspectos como la edad (cuanto más tarde, más definido tiene el carácter) y la personalidad.
- Cuando se capa a un perro, desaparece con el tiempo su necesidad de ir marcando todo con su orina y el deseo eufórico hacia las perras en celo, pero como antes he dicho, depende de varios factores.
- Al reprimir los deseos hacia las perras, evitaremos también que puedan escaparse o se pierdan.
- La próstata de un perro castrado no sufrirá los mismos problemas ni enfermedades que la de un perro sin castrar. Esto se traduce en una mayor reducción de posibilidades de desarrollar varios tipos de tumores (algunos más malignos que otros), abscesos y quistes prostáticos. Cuanto antes se realice la cirugía, mayor es la probabilidad de prevenirlos.
- A nivel social será más tolerante con otros perros, por no tener el afán dominante que causa la testosterona. Pero igual que en el caso anterior, depende del comportamiento que tenga ya fijado a la hora de castrarle.
- Si se aparea con una hembra, algo que puede seguir haciendo con total normalidad, no la dejará preñada. Así evitará que haya más perros buscando un hogar, ya hay demasiados en las protectoras.
- Las hembras castradas tendrán muchas menos posibilidades de padecer cáncer de ovarios, de mama y uterino. También evitaremos infecciones en este último órgano.
Las hembras castradas no tendrán el ciclo menstrual, por lo que no atraerán a los machos. Evitaremos también pseudogestaciones o embarazos psicológicos.
Inconvenientes de castrar a un perro
Siempre que la castración se realice en la edad recomendada no deben surgir mayores problemas ni desventajas por castrar a un perro. Sin embargo, nada es perfecto en este mundo y en ocasiones se dan algunos efectos negativos cómo:
- Si se castra a un can antes de lo recomendado es posible que no termine de desarrollar cierto carácter como si lo hiciéramos un tiempo después.
- La mayoría de ejemplares pueden mostrar un aumento del apetito, que terminará en obesidad si no se controla la alimentación y el ejercicio.
- Algunos perros castrados desprenden un olor atractivo para otros machos, que pueden intentar montarlos y con ello, provocar una regañina entre perros.
Estas desventajas son efectos secundarios de la castración en algunos perros, en un número muy pequeño en comparación a los perros que no sufren ningún problema al ser castrados.
Claramente a nivel de patologías, es mucho más beneficioso castrar a nuestra mascota.
La mejor edad para castrar a un perro macho
Siempre se ha afirmado que la mejor edad para castrar a un perro macho es antes de cumpla el año de vida, es decir, entre los nueve y los doce meses. Sin embargo, está demostrado que es mucho mejor esperar a que alcance la madurez sexual.
La edad ideal para castrar a un perro depende de la raza, lo conveniente es realizarlo cuando el perro ha terminado de desarrollarse y de madurar sexualmente por completo. En el caso de razas pequeñas hay posibilidad de hacerlo antes ya que estos maduran en torno a los seis-doce meses. Razas grandes o gigantes pueden esperar más ya que terminan su madurez en torno a los dieciocho meses.
Una vez castrado el perro, necesitará llevar un collar Isabelino durante unos días para evitar que se lama los puntos de la incisión. Suele precisar de unos días de antiinflamatorio y de curas diarias con un desinfectante como puede ser la cristalmina, entre otros. En muy pocos días estará cómo nuevo y con las mismas ganas y energía para jugar.
Los perros castrados tardan entre seis y diez meses en eliminar toda la testosterona de su organismo, por eso a veces debemos ser pacientes antes de comenzar a notar los cambios beneficios que aportan castrar a un can.
Un perro castrado puede realizar una vida completamente normal y mantener relaciones sexuales con perras cuando lo desee (o cuando pueda). Simplemente no podrá procrear, es decir, tener cachorritos.
La mejor edad para castrar a una perra
Hay diferentes opiniones entre los expertos veterinarios entre cuando es el mejor momento para castrar a nuestra perrita. Hay quienes prefieren castrar antes del primer celo (0,06% de padecer tumores malignos durante toda su vida) y otros que prefieren después del primer celo (dicho porcentaje aumenta hasta el 6-8%). En el primer caso, el porcentaje es menor, pero cabría la posibilidad de evitar el completo desarrollo del carácter de nuestra perrita.
Si elegimos la segunda opción, deberemos esperar dos-tres meses desde que acaba el estro.
De esta forma evitaremos que padezca varios tipos de cáncer y además no podrá tener cachorros, no se quedará preñada aunque tenga relaciones sexuales con un perro.
Tras la operación, las perras castradas deben llevar también un collar Isabelino durante una semana – diez días para evitar que se laman la herida y, por ende, se infecte. Será recomendable el uso de antiinflamatorios durante los primeros días, y el veterinario valorará el uso de antibióticos. Durante este periodo es recomendable que lleven una vida tranquila, paseos cortos (no hacer el bruto) y descansar.
Una vez pasado este periodo, podrán llevar una vida totalmente normal y activa, jugando, corriendo e incluso apareándose sin peligro de quedar preñadas. Debemos controlar la dieta y ejercicio a partir de la castración, ya que muchos animales tienden a engordar después de dicha cirugía.
Diferencias entre castrar y esterilizar a un perro
La castración en machos consiste en extirpar los testículos mediante una operación en un centro veterinario. De esta forma, los testículos no podrán generar esperma ni tampoco testosterona.
La esterilización en machos es vasectomizar, consiste en eliminar la posibilidad de que tengan descendencia reprimiendo su esperma, bien mediante una sutura en el conducto deferente, o sección. Esto evitará que salga semen, pero no se le quitará la producción de testosterona, por lo que seguirá teniendo comportamiento de macho sin castrar.
Así pues, los beneficios de esterilizar se reducen a eliminar el riesgo de tener descendencia. En ambas cirugías, se tiene que someter a nuestra mascota a anestesia general. La castración hoy en día está tan frecuentemente realizada que a nivel post operatorio no hay apenas diferencia ni riesgo entre una y otra.
