Aunque todos los perros son capaces de hacernos pasar buenos ratos de diversión, en este artículo vamos a destacar siete razas con las que las carcajadas van a estar aseguradas por su carácter o comportamiento.
Border collie
Estos perros son muy inteligentes y activos, por lo que resulta sencillo educarlos, enseñarles a hacer trucos o a superar circuitos de agility.
Además, su tamaño mediano, con unos 14-22 kg de media, los hace aptos para poder acompañarnos a todas partes.
Encantador con niños y sociable con otros animales, eso sí, necesita un nivel de actividad elevado, lo que puede complicar su vida en un piso, y cuidados para su pelaje largo.
Aunque lo solemos ver como perro de compañía, el border collie podría dedicarse al pastoreo, donde tiene sus orígenes y donde gracias al aire libre y el ejercicio, es donde son más felices.
Bóxer
Estos perros son, sencillamente, adorables. Aunque pueden mostrarse desconfiados o incluso agresivos con otros perros si no son bien educados, quizás influenciados por su pasado como guardianes o luchadores, suelen ser amigables con todos y les encanta jugar sin importar la edad que tengan.
Además, es habitual en el bóxer que lo hagan gruñendo, sin que signifique que están enfadados, como sabremos si nos fijamos en su lenguaje corporal, con el trasero elevado y las patas delanteras y la cabeza apoyadas en el suelo o correteando alrededor del otro perro o del humano, si es que está jugando con nosotros.
Necesitan ejercicio y les encanta la compañía y la diversión, por suerte tienen un tamaño adecuado como para que nos acompañen a cualquier sitio, aunque algunos ejemplares, sobre todo machos, pueden llegar a superar los 30 kg.
Mantienen toda su vida su carácter de cachorro. Su pelo corto es fácil de cuidar. Son glotones, por lo que tenemos que controlar los alimentos que dejamos a su alcance y no pasarnos con posibles premios para no favorecer su tendencia a la obesidad.
Por lo demás, son inteligentes y pueden aprender con relativa facilidad. Su expresiva mirada es otro de sus atractivos. Ideal para familias con niños.
Bulldog francés
Estos pequeños se han convertido en unos perros muy populares, aunque cuentan con la pega de ser propensos a diversas enfermedades como las alergias o aquellos trastornos respiratorios derivados de la conformación de su nariz, muy achatada.
Precisamente ese hocico arrugado origina una serie de ruidos y gruñidos que propician la risa y le confiere un aspecto especial a su cara, al igual que su expresividad y su cuerpo pequeño y compacto.
Su pelaje corto requiere pocos cuidados, pero debemos estar muy atentos a su salud, especialmente cuando las temperaturas son más altas. Son muy juguetones y aceptan bien a otros animales y a niños.
Bulldog inglés
El aspecto de este bulldog es muy divertido debido a su cara, de hocico achatado, su gran lengua, su cabeza ancha, su cuerpo fuerte y rechoncho, puede llegar a pesar hasta 25 kg, y sus patas cortas, pero musculosas.
Cariñosos y fáciles de cuidar gracias a su pelo corto, pueden presentar problemas respiratorios, al igual que el bulldog francés, por lo que tendremos que vigilarlos, especialmente cuando hacen ejercicio, aunque no necesitan una gran actividad, o hace mucho calor.
Aceptan bien a los niños y a otros perros, a pesar de sus orígenes como perro de lucha.
Pug o carlino
Es otra de las razas de nariz achatada que, por ello, se va a caracterizar por emitir todo un repertorio de sonidos como gruñidos y resoplidos.
Muy expresivos y testarudos, presentan un aspecto curioso, con unos ojos saltones, una cara ancha y redondeada, un cuerpo pequeño y compacto, unas orejas pequeñas y una graciosa cola enroscada sobre sí misma.
Son comilones, por lo que debemos vigilar su dieta, cariñosos y aptos para convivir con niños.
Su pelo corto es sencillo de cuidar pero, como todos los perros de nariz arrugada, debemos tener cuidado para evitar problemas respiratorios. Suelen ser alegres y muy poco agresivos.
San Bernardo
Este enorme perro, que puede llegar a alcanzar hasta 90 kg de peso, alcanzó la fama gracias al cine, donde pudimos presenciar sus travesuras como Beethoven.
El San Bernardo es como un oso, lleno babas y con unas grandes patas, lo que hay que tener en cuenta a la hora de convivir con él.
Su pelo, no muy largo pero sí abundante y denso, también va a requerir cuidados regulares.
Cariñosos y aptos para convivir con niños, como todos los perros de tamaño gigante antes de adoptarlos tendremos que tener en cuenta que van a suponer un mayor gasto y que requieren un espacio adecuado y una correcta educación para conseguir una convivencia sin problemas.
Es un gigante amable que vive feliz en climas fríos. Al que le encanta estar con su familia y hacer gamberradas.
West Highland White Terrier
Conocido popularmente como «westie», estos perros son pequeños, de unos 7-10 kg de peso, juguetones, cariñosos y con un bonito manto blanco que suele requerir cuidados especializados.
Como contrapartida, tienden a padecer dermatitis alérgicas, por lo que será un aspecto a vigilar.
Les gustan los niños y otros perros. Algunos pueden ser bastante ladradores y nerviosos por lo que, aunque sean de tamaño pequeño, necesitan una correcta educación. Son activos, enérgicos, alegres y atentos.