Mi perro persigue bicis, coches o corredores

Son muchos los perros que principalmente desde cachorros, adquieren conductas poco saludables cómo comenzar a perseguir bicicletas, personas que están corriendo o incluso coches. Al principio simplemente ladrarán mientras les persiguen pero tarde o temprano terminaran mordiéndoles.
Es importante corregir este tipo de conducta cuanto antes, para que no se afiance en la mente de nuestro perro y piense que es algo normal o que esta bien. No debemos olvidar que no sólo se pone en peligro nuestro perro, sino que puede morder o causar un accidente a terceras personas, algo realmente grave.
Desde SoyUnPerro.com vamos a explicar cómo podemos evitar que nuestro perro tenga este tipo de conducta, los pasos a seguir para corregirlo y los mejores consejos para que nunca más se vuelva a repetir. Teniendo siempre presente, que debemos insistir durante varias semanas para que aprenda bien la lección.
Índice
¿Por qué mi perro persigue a personas que hacen footing, a bicis o a coches en movimiento?
A niveles generales y salvo pequeñas excepciones, lo habitual es que el perro lo haga por territorialidad o por miedo. Así que lo primero que debemos averiguar es si nuestro perro se siente asustado cuando junto a el pasa una bici, un corredor o un coche.
Si no se asusta, es un caso de territorialidad en el que el perro simplemente ve al corredor, bici o coche cómo un extraño que intenta pasar por su territorio. Obviamente el perro sentirá la necesidad de defender su territorio y saldrá lanzado hacia ellos ladrando y finalmente mordiendo.
Si es por miedo, es incluso pero ya que un perro asustado puede entrar fácilmente en estado de pánico y ser completamente impredecible. Aunque esto no significa que no se pueda cambiar su conducta, simplemente debemos trabajar más intensamente.
La mente de un perro es en realidad muy simple, aunque en ocasiones queramos pensar que razonan… no lo hacen. Su instinto es primordial y defender su territorio o defenderse ante posibles peligros son instintos primarios. Simplemente debemos trabajarlos para modificar esta conducta y evitar así situaciones de peligro.
Mi perro persigue runners, bicis o coches para defender su territorio ¿Qué hago?
En este caso lo fundamental es hacer comprender al perro que no es su territorio sino el tuyo y que no debe salir corriendo detrás de ellos. Enseñar esta lección a nuestro perro es realmente sencillo aunque necesitaremos ser perseverantes.
No esperes que tu perro aprenda esta lección en dos días, porque no será así. Deberás trabajar en su conducta posiblemente durante cuatro u ocho semanas para obtener resultados, así que simplemente mentalízate y practica a diario.
Es de vital importancia que tu perro haga ejercicio, que queme su exceso de energía a diario. De esta forma será más tranquilo y por ende mucho más sencillo educarlo y evitar malas conductas.
Ata a tu perro a una correa de unos dos metros y sal a pasear con el por zonas donde sepas que hay personas haciendo ejercicio, bicicletas paseando o coches en marcha. Cada vez que tu perro haga amago de intentar salir corriendo detrás de alguno, o les ladre, regáñale y dile un «No!» alto y rotundo. Debes mostrarte enfadado para que el detecte tu enfado (enfádate realmente, pero recuerda, nunca debes pegarle).
Con la practica diaria tu perro irá aprendiendo poco a poco, en una semana verás cómo sus amagos van disminuyendo y en tres semanas posiblemente sólo intente hacerlo ocasionalmente. Sigue trabajando su conducta a diario y haz que queme su exceso de energía realizando ejercicio.
También puedes realizar trucos con la ayuda de otras personas, por ejemplo pidiendo a un amigo o vecino que pase corriendo o con su bici delante vuestra mientras paseáis. Y que si el perro hace amago de intentar salir detrás de el, tu amigo o vecino se detenga y también le regañe (tu también debes hacerlo).
Mi perro persigue bicicletas, corredores o coches por miedo ¿Cómo lo evito?
La única forma de evitar este tipo de conducta por miedo es eliminando el miedo, algo muy sencillo pero que también necesitará de trabajo continuado. Simplemente debemos ser persistentes y poco a poco, iremos apreciando grandes progresos.
Para evitar que nuestro perro tenga miedo a cosas que se mueven rápidamente o pasen rápido a nuestro alrededor, debemos socializarlo con ese entorno. Iremos inicialmente a algún sitio donde no haya nadie que nos moleste y le pediremos a un amigo que pase de vez en cuando corriendo o en bici.
Nuestro perro debe estar atado y nosotros debemos ordenar que siente cuando veamos venir a nuestro amigo. La técnica consiste en distraer su atención para que no se centre en nuestro amigo, así que cuando el perro se centre en el… debemos usar comida, juguetes o algo que le guste mucho para captar su atención.
Repetiremos este ejercicio durante una semana antes de pasar a un lugar más transitado, donde repetiremos el mismo ejercicio una y otra vez, todos los días durante un par de semanas. Con el tiempo iremos cambiando a sitios cada vez más transitados pero manteniendo la atención de nuestro perro cuando veamos llegar el peligro.
Una vez que nuestro perro se haya acostumbrado a estar en sitios transitados, simplemente debemos dejar de llamar su atención para evitar el peligro de forma paulatina. Una vez si y una no por ejemplo, repitiendo el ejercicio a diario durante varias semanas más.
Es importante que nuestro perro también realice ejercicio a diario, llevarlo a correr con nosotros o a patinar por ejemplo es una excelente idea. Así el quemará su exceso de energía y será más tranquilo a todos los niveles.