Cómo enseñar al cachorro a defecar fuera de casa

Enseñar a los perros a orinar fuera del hogar es de las tareas que más preocupan a los cuidadores, sobre todo cuando se deciden a adoptar a un cachorro. Pero también es posible que haya que acostumbrar a evacuar en la calle a un perro adulto.

Como todos los asuntos relativos a la educación canina, puede conseguirse, pero requiere tiempo, paciencia y una buena disposición por nuestra parte, ya que hay que educar sin gritos y, por supuesto, sin violencia.

¿Cómo hacen sus necesidades los cachorros?

Los cachorros de perro son comparables a los bebés en cuanto a la evacuación se refiere. Esto quiere decir que no controlan sus esfínteres y que eliminan tanto heces como orina con mucha más frecuencia que los perros adultos.

Nuestra idea es que lo hagan en el exterior del hogar, pero hay varios aspectos a considerar antes de abordar este aprendizaje. En primer lugar, hay que ser plenamente conscientes antes de adoptar un cachorro de que no orina en casa por fastidiar. Se debe a que fisiológicamente no está capacitado para aguantar ni las heces ni la orina.

Ese es un proceso que lleva su tiempo y que irá consiguiendo, poco a poco, según vaya cumpliendo meses. Por eso va a orinar y a defecar en casa durante la noche o mientras salimos al trabajo o a hacer la compra. Simplemente porque no aguanta tantas horas.

perro-intentando-hacer-caca

¿Dónde hacen sus necesidades los cachorros en casa?

Aunque estuviésemos todo el día pendientes del perro para sacarlo cada poco tiempo, si no ha completado su calendario de vacunaciones, no puede pasear por cualquier sitio. El contacto con perros de los que desconocemos si están o no vacunados o tan solo con sus deposiciones es fuente de contagio de parásitos y de enfermedades muy graves.

Por eso, o disponemos de un sitio seguro o tendremos que habilitarle un lugar en casa. Tradicionalmente se han empleado periódicos. Se ponían un montón en el sitio elegido, el perro orinaba o defecaba, se tiraban a la basura y se volvían a poner periódicos limpios.

Hoy en día también hay empapadores de entrenamiento, que cumplen esta misma función con la ventaja de que mantienen el suelo a salvo, ya que los periódicos calan. Hay que ponerlos donde no nos molesten, pero en un lugar al que el cachorro pueda acceder siempre y le quede relativamente cerca de donde pase la mayor parte del tiempo.

Enseñar al cachorro a hacer sus necesidades sobre los periódicos

Cuando el perro llega a casa debemos tener preparado todo lo que necesita. Así, el rincón de los periódicos/empapador estará listo. Si percibimos que el cachorro comienza a olisquear como buscando o adopta posición de orinar o defecar, podemos trasladarlo al lugar de evacuación. No pasa nada si no nos damos cuenta o no nos da tiempo.

Simplemente, podemos cubrir buena parte del suelo con periódicos e ir reduciendo la zona hasta dejar solo el lugar que más utiliza el perro o mojar un papel en su orina y ponerlo sobre los periódicos limpios. El cachorro buscará volver a orinar allí donde le huele. El suelo se limpia con detergentes enzimáticos o vinagre, sin hacer ningún comentario.

Si lo descubrimos, lo elogiaremos justo en el momento en el que lo está haciendo. De lo contrario no entenderá por qué acción se le premia. De esta manera, ignorando cuando evacúa fuera y premiándolo si lo hace en su sitio, aprenderá a hacerlo siempre donde corresponde. El segundo paso es trasladar el lugar de evacuación a la calle.

Enseñar a tu perro a hacer sus necesidades fuera de casa

Es habitual que el cachorro en la calle huela los rastros de sus congéneres, lo que constituye un buen estímulo para que él también deje su olor. De nuevo, en cuanto orine o defeque en la calle, lo premiaremos efusivamente, justo en el momento. Eso sí, hay que recordar que los cachorros van a evacuar con más frecuencia que los adultos.

Por eso tendremos que sacarlos también más. Al principio podemos hacerlo tras darles de comer, cuando se despiertan después de haber dormido un buen rato, nada más levantarnos nosotros y antes de acostarnos, si notamos que están buscando, etc. En los cachorros más pequeños estamos hablando de salidas cada 3-4 horas, aproximadamente.

Por eso es probable que orine en casa durante la noche. Según vaya creciendo, va a ir aguantando más tiempo sin evacuar, con lo que las salidas ya podrán hacerse cada seis horas hasta que lleguemos al patrón de los adultos, que suelen salir cada ocho horas, es decir, unas tres veces al día.

¿Por qué un perro adulto orina dentro de casa?

La mayoría de los perros adultos, aunque los adoptemos ya mayores, suelen evitar evacuar dentro de casa, por lo que no tendremos problemas en que orinen fuera. Basta con que les demos la oportunidad, sacándolos a pasear un mínimo de tres veces al día. Pero depende de las circunstancias vitales por las que haya atravesado cada perro.

Así, podemos encontrarnos con adultos con problemas de eliminación. En estos casos conviene empezar de cero y aplicar las pautas establecidas para cachorros. Esto es, darles muchas oportunidades para evacuar en la calle y premiarlos siempre que lo hagan bien, ignorando los errores. No deberían tardar mucho en entender qué es lo que queremos.

Pero, si los problemas no se solucionan, debemos acudir al veterinario para que descarte que exista algún trastorno de salud. Si el perro está sano, orinar en casa podría ser debido a un problema de conducta que debe ser resuelto por un experto en comportamiento canino o un etólogo.

Problemas por los que un perro orina en casa

Por último, si nuestro perro orinaba sin problemas fuera de casa pero empieza a hacerlo dentro, hay que acudir al veterinario. Hay diferentes problemas de salud que se pueden manifestar con un aumento en la frecuencia de evacuación.

Ejemplos relativamente habituales son la cistitis, la enfermedad renal o el síndrome de disfunción cognitiva. Si el perro está sano, el siguiente paso es consultar con un profesional de comportamiento canino.

María Besteiros

Auxiliar Técnico Veterinaria y presidenta de una protectora de animales. Desde niña mis intereses giraron alrededor de los animales, la lectura y la escritura, por eso me formé para ejercer como ATV y me doctoré en Filoloxía Galega. Además, estoy vinculada a la protección animal a través de protectoras. En la actualidad soy casa de acogida de siete perros y cinco gatos. Escribir sobre perros es una forma de compartir los conocimientos que he adquirido sobre ellos a lo largo de los años, a la vez que me permite unir mis profesiones.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta