Seguro que en más de una ocasión habéis visto a vuestro peludito o a algún otro perro por la calle arrastrar el culopor el suelo mientras camina con sus patas delanteras. La situación en sí es bastante cómica, aunque no creo que al perro le haga la misma gracia que a nosotros cuando le vemos realizar dicha postura… que bien puede parecerse al caminar de un pingüino.
El motivo por el cual mi perro arrastra el culo es muy sencillo, le pica. Los perros pueden sufrir picor en el ano por varios motivos y dado que no tienen manos para rascarse, lo más práctico es agachar el culete y arrastrarlo por el suelo. Vamos a ver cuáles son los motivos más comunes por los cuales un perro lo hace y cómo solucionarlos.
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Perros que arrastran el ano por las glándulas anales
Si a tu perro le pica el culo, una de las causas más probables es que tenga las glándulas anales o perianales llenas. Los perros, gatos y algunos otros mamíferos (los humanos no las tenemos), tienen unas glándulas alrededor del ano las cuales drenan al interior del recto para salir después al exterior.
Dichas glándulas tienen varias funciones, las cuales son: lubricar las heces para que salgan más fácilmente y dejar su olor personal, como una huella de identidad. El líquido de las glándulas anales de cada perro huele diferente (indetectable para los humanos), así los perros cuando huelen una caca ya saben a qué sexo pertenece, edad del otro animal, grado de dominancia… etc.
Esto da lugar a la famosa pregunta de: ¿Por qué los perros se huelen el culo? Sencillamente, para conocer datos de la otra mascota. Es una forma muy curiosa de dejar su marca personal en sus excrementos, pero también muy efectiva.
No es necesario vaciar las glándulas anales manualmente, por lo general los perros las vacían cuando hacen caca por presión de estas contra las propias glándulas. Pero en algunas ocasiones las glándulas no se vacían (heces poco consistentes) y entonces nuestro perro sufre de molestos picores, por lo que comienza a arrastrar el culo por el suelo.
Si el caso fuera este, simplemente debemos proteger nuestra mano con un guante de látex y con la ayuda de un trozo de papel de cocina, agarrar el ano de nuestro perro con un poco de fuerza y tirar un poco hacia afuera, de forma que las glándulas se vacíen sobre el papel. Si no sabemos hacer este ejercicio, es recomendable ir al veterinario y que sea el quien lo haga, así aprenderemos como hacerlo en casa para futuras ocasiones.
Es sumamente importante revisar bien el ano de nuestro perro antes de realizar este ejercicio, porque también puede darse el caso de que nuestro perro tenga una fístula en el ano (conexión anómala entre la glándula y el exterior por exceso de líquido) o en las propias glándulas.
Si observamos alguna herida en el ano o cerca del ano, debemos acudir al veterinario para que nos facilite un tratamiento adecuado. No obstante, podemos comprar ¨fibor¨ (fibra natural) para ayudar a nuestra mascota a ir vaciando si tiene problemas estas glándulas.
Mi perro frota su ano contra el suelo por parásitos
Otro motivo muy común pero menos que el anterior por el cual a nuestro perro le pica el culo, es por la presencia de parásitos internos. Los perros son nuestra pasión, nuestra vida, nuestros más fieles compañeros y amigos, pero no dejan de ser animales con instinto natural para comer y beber del ambiente en el que pasean (y por donde otros animales lo hacen).
Es por eso por lo que nuestros perros adquieren con bastante facilidad parásitos internos (lo que los humanos conocemos como lombrices), que se manifiestan en forma de gusanos pequeños, finos y largos en las propias cacas de nuestros perritos y con picores frecuentes en el ano.
La mejor forma de verificar que nuestro perro tiene parásitos intestinales es observando sus cacas, si observamos que en sus cacas hay pequeñas lombrices o gusanos (suelen ser muy finos y blanquecinos), nuestro perro sufre de una infección de parásitos.
Otra forma de observarlos si sospechamos de ello pero no los vemos macroscópicamente en las heces es llevar un bote con heces de tres días consecutivos a nuestro veterinario para que las analice al microscopio en busca de huevos. Pero tranquilo, no te alarmes, esto es muy sencillo de solucionar.
La mejor forma de eliminar los parásitos internos es con la ingesta de una pastilla destinada a tal fin. Nuestro veterinario nos dará la pastilla adecuada para nuestro perro, ya que dependiendo del peso será diferente la dosis. Simplemente debemos darle la pastilla junto con la comida y así solucionaremos el problema de los parásitos de nuestro perro.
Para garantizar que nuestro peludo no tenga más parásitos, debemos suministrarle una pastilla antiparasitaria una vez cada tres meses o 48 días (dependiendo de fármaco), de esta forma estará siempre sano y no sufrirá de esos molestos picores.
Otras causas que provocan picor en el ano
Otro motivo mucho menos común puede ser que simplemente tienen un poco de picor debido a la alimentación que toman. Si no termina de sentarles del todo bien o si contiene algún ingrediente del que tengan intolerancia o alergia, así como si han comido algo picante, es muy probable que les cree un prurito anal (picor de culo).
En estos casos, bastará con cambiar de alimentación hasta dar con la indicada, siendo recomendable centrarnos en piensos libres de cereales o hipoalergénicos.
¿Qué hacer si a un perro le pica el culo?
Sabiendo los principales motivos que pueden ocasionar un picor de culo molesto en nuestros perros, debemos repasar como solucionarlo. Es importante analizar y observar a nuestro peludo para determinar la causa de sus molestias anales.
Si observamos a nuestro perro lamerse el ano con frecuencia o arrastrar el culo por el suelo, lo primero que debemos hacer es examinar su culete. Debemos verificar que no tiene ningún trozo de hierba atascado o colgando, ya que a veces cuando hacen caca se les queda algún resto que han comido previamente atascado. Eso puede molestarle siendo un motivo para arrastrar el culo. Si observamos eso, simplemente le ayudaremos a sacar el trozo atascado.
Debemos asegurarnos de que nuestro perro no tiene nada extraño en el ano, ninguna herida o fisura, fístula, picadura, dermatitis… Si observamos algo extraño, acudiremos al veterinario para que el determine el problema y nos facilite un tratamiento adecuado.
Si no hemos observado nada en el culo de nuestro perro, procederemos a revisar sus heces (hay que mirar su última caca) y cerciorarnos de que no hay gusanos. Si encontráramos algo extraño que se mueve, simplemente acudiríamos a nuestro veterinario para que nos proporcione una pastilla para eliminar parásitos internos.
Si no hemos detectado nada en el ano, ni en las cercanías (glándulas) ni tampoco hemos visto nada raro en sus heces, es posible que nuestro perro no haya vaciado bien sus glándulas perianales y necesite que se lo hagamos de forma manual. Es un proceso muy sencillo pero si no sabes hacerlo conviene aprender del veterinario para realizarlo en casa las veces futuras.
Como veis, los motivos no presentan gravedad en sí, aunque algunos deben precisar de asistencia veterinaria.