¿Nunca te has preguntado cómo es posible que a tu perro le encante sacar la cabeza por la ventanilla del coche, pero sin embargo detesta que le soples? Parece algo contradictorio, pero en realidad tiene mucho sentido.
A un perro le molesta tanto que una persona le sople, que puede incluso mostrarse algo agresivo para darnos un aviso y que dejemos de hacerlo. Pero ¿por qué? desde SoyUnPerro te lo explicamos.
Irrita sus sentidos de forma directa
Cuando le soplamos a nuestro perro para gastarle una broma, en realidad estamos irritando gran parte de sus sentidos cómo su olfato, su vista y su oído.
La nariz de los perros siempre está húmeda porque esto les ayuda a percibir mejor los olores, cuando les soplamos se la resecamos un poco de forma involuntaria. Lo mismo sucede con sus ojos, que perciben el aire y se irritan un poco.
Los oídos son muy sensibles en los perros y al soplarles podrás apreciar que mueven incluso sus orejas para evitar el flujo de aire, otro claro ejemplo de lo irritante que es esto para ellos.
Así que piénsalo dos veces antes de soplarle a tu perrito, porque para nosotros es algo divertido en plan broma, pero para ellos es algo irritante y molesto.
Entonces… ¿por qué sacan la cabeza por la ventana en el coche?
Porque posiblemente tengan calor o simplemente les apetezca sentir la sensación de ver cómo el aire impacta en su rostro. Hay que saber diferenciar cuando un perro hace algo porque le apetece… y cuando lo consiente porque le obligamos, le apetezca o no.
Yo también saco la cabeza por la ventada a veces, me gusta la sensación del aire deformando un poco mi cara por la presión. Pero eso no significa, que me guste que vengas a soplarme ¿lo enciendes verdad?
Les faltamos al respeto
Para nuestro perro somos el líder de la manada, el alfa, el jefe o cómo quieras llamarlo, por eso nos permiten hacerles muchas cosas a regañadientes, incluso cuando les molesta.
Que alguien se acerque a ellos y les sople es una provocación directa, por eso es normal que adquieran una posición defensiva e incluso agresiva.
Fíjate cuando un perro que no conocen se acerca a ellos y les mira fijamente, o bien comienzan a reñirse con gruñidos o bien uno de los dos se retira en plan sumiso para evitar un enfrentamiento.
Lo mismo sucede cuando les soplan, es cómo una provocación que además es muy irritante. Quizás a nosotros nos lo permitan… de mala gana, pero cuidado con los niños y con los amigos o desconocidos, porque ellos no tienen nuestro estatus social en la manada.
¿Soplidos si Soplidos no?
En vez de pensar hasta donde es tu perro de aguantar antes de que te gruña por molestarle… ¿por qué no piensas en jugar un poco con el a la pelota o salir a dar un paseo?
En serio, los soplidos molestan y mucho a los perros, es una práctica que debemos evitar pues no es para nada graciosa (si para nosotros… no para ellos).
Evitar soplarle a tu perro en la cara y sobre todo, evita que otras personas lo hagan. Porque a ti quizás te respete pero a un desconocido o a alguien con un estatus inferior al tuyo para el, no le respetaran.