Es completamente normal que cuando nuestra perra se quede embarazada nos invadan las dudas. Cuando será el parto, sabremos atenderla cuando comience a parir, cuanto dura el proceso de dar a luz, etc… Debemos estar tranquilos, todo es mucho más sencillo de lo que parece y si todo marcha como debe, nosotros mismo podemos atender el parto.
Es importante tener presente algunos consejos para facilitar a nuestra perra el proceso de dar a luz, sobretodo si es primeriza; observarla durante los últimos días de gestación y apoyarla en todo momento. Será necesario que intentes saber si tu perra desea parir en tu compañía o por el contrario prefiere un lugar solitario y oscuro, alejada de todos.
Desde Soyunperro vamos a repasar cuáles son los síntomas más notorios ante un inminente parto y cómo actuar.
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¿Cuanto dura la gestación de una perra?
La duración total del periodo de gestación de una perra varía mucho en función de su edad, tamaño y raza. Algunas perras tienen un ciclo de gestación de tan sólo cincuenta y cinco días, mientras que otros llegan casi a los setenta días.
Cómo debemos acudir al veterinario para realizar las ecografías rutinarias y verificar que todo esté bien, él irá calculando la duración del embarazo de nuestra perra. Ya que mediante la ecografía puede determinar el desarrollo de los cachorros y estimar una fecha aproximada para el parto.
Los perros generalmente no siguen ninguna fecha para este fin, simplemente comienzan a parir cuando la madre naturaleza les indica que ha llegado el momento, cuando su cuerpo les indica que es la hora de dar a luz.
De cualquier forma es conveniente aproximarnos a la fecha más cercana al parto, permitiendo así una mejor atención y preparación del mismo a manera de prevenir las pérdidas neonatales u otras complicaciones. Estimar una fecha lo más cercana a la realidad nos permite mejores decisiones en términos de la planificación de las cesáreas, en casos que fuere necesario.
¿Qué síntomas muestra una perra cuando va a dar a luz?
El parto transcurre en 3 fases (dilatación del canal del parto, expulsión fetal y expulsión de la placenta). Cada una de estas fases lleva aparejado cambios hormonales que determinan una serie de síntomas.
Aunque estos síntomas no pueden tomarse al pie de la letra, ya que cada perra es un mundo y no todas las perras los manifiestan de la misma manera… se puede decir que a rasgos generales, la mayoría de perras muestran alguno o varios de estos síntomas.
Vamos a repasar cuáles son, que características ofrecen y cómo debemos actuar ante ellos. Recordar que el momento de dar a luz de un perro es un momento íntimo. La actitud de la perra respecto al propietario puede variar, mientras algunas prefieren contar con tu presencia, otras buscarán un lugar apartado y oscuro para parir.
Un lugar ideal para parir
Es muy habitual que uno de los síntomas sea que nuestra perra busque un lugar acogedor y tranquilo para dar a luz, por lo general se trata de lugares que en cierto modo pueden parecer una madriguera. Nuestra perra buscará un lugar seguro y tranquilo en casa o en el exterior y comenzará a mostrar posturas cómodas mientras llega el momento.
Algunos perros se hacen una bola y parece que están incubando un huevo, es lo que se denomina la postura del nido. Este tipo de comportamiento nos da pistas de que la hora de parir está cerca.
Reclama tu atención y evita a otros perros
Cuando nuestra perra sepa que el momento está cerca, evitará que otros perros o animales estén a su lado. Es una forma ancestral de protección para evitar que otros animales o perros intenten atacarla cuando está pariendo o intenten dañar a sus cachorros.
Si tenemos más perros en casa, debemos evitar que molesten a la perra que va a dar a luz y apartarlos. Por otro lado en la mayoría de los casos es completamente normal que la perra busque a su dueño y reclame su atención, ella sabe que va a dar a luz y quiere que tú estés a su lado ayudándola y apoyándola.
Si crees que esta situación puede abrumarte, puedes llamar al veterinario para que te acompañe durante el proceso del parto. Aunque es algo que puedes hacer por ti mismo siempre que no haya complicaciones. Si aprecias que tu perrita está más nerviosa de lo normal, es porque la hora de parir está cerca. Es algo completamente normal que estén más alteradas de lo habitual ya que para ellos también es algo excepcional.
Mi perra se lame sus partes y expulsa líquidos
Otro claro síntoma de que el parto está cerca es precisamente este, cuando nuestra perra comience a lamerse sus partes con insistencia podremos apreciar cómo al cabo de un momento comienza a salir un liquido viscoso de sus genitales.
Es un tapón que forman de manera natural para evitar que entren infecciones por el útero y antes de parir, expulsan ese tapón de aspecto verdoso, blanquecino o amarillento. Es un poco desagradable a la vista pero algo que no debe preocuparnos, ya que es completamente natural.
También es habitual que no coma su pienso o alimentación habitual, ya que en las horas o días previos al parto suelen perder el apetito e incluso puede presentar náuseas y vómitos. Es algo que no debe preocuparnos en demasía. No preocuparnos NO significa dejar de observar cada cambio, esto es válido para todas las fases del parto e incluso para el puerperio (etapa posterior al parto).
Disminución de la temperatura y aumento de las contracciones
Un buen truco pata determinar cuando nuestra perra está de parto, es medir su temperatura corporal a través del recto (ano). La temperatura habitual de nuestra perra será de unos 38 grados durante los días previos al parto, pero cuando el momento de dar a luz se acerque, su temperatura bajará entre uno y dos grados.
Esta disminución en la temperatura se debe a la bajada brusca de los niveles de progesterona (hormona determinante en el mecanismo del parto). Las contracciones son también un claro síntoma de que el parto es inminente, al igual que sucede con los humanos. Podemos apreciar las contracciones de nuestra perrita en su tripa, contar el tiempo y apreciar como se produce el milagro de la vida.
¿Qué debo hacer mientras mi perra da a luz?
En realidad no debemos hacer nada, una vez que ella haya aceptado nuestra compañía, apoyarla con todo nuestro cariño. Cuando nuestra perra haya elegido el sitio para dar a luz, debemos colocar allí toallas limpias o sábanas, para que se sienta muy cómoda.
Cuando el momento se acerque, ella adoptará una postura cómoda para el parto, puede tumbarse de costado y esperar a que los cachorros vayan naciendo de uno en uno o permanecer de pie y ver cómo van cayendo con cuidado. En ocasiones pueden transcurrir hasta cuarenta minutos entre cachorro y cachorro, por lo que debemos tener mucha paciencia.
Es importante que observes la presentación en la que vienen los cachorros, si sale primero la cabeza todo va bien, en cambio si observaras que salen las extremidades posteriores primero, no es que vaya mal, pero requiere cierta ayuda de tu parte. Es un procedimiento muy sencillo y debes estar lo más ecuánime posible, de manera que tu perra no perciba temores de tu parte.
Tomarás al neonato por sus extremidades y aprovechando cada contracción uterina vas a ayudar a que este salga, de una manera delicada. Cuando el cachorro nazca, la madre comenzará a lamerlo hasta que respire por si sólo. No debemos intervenir siempre y cuando veamos que nuestra perrita ha retirado todas las membranas y fluidos de las vías respiratorias.
De lo contrario lo haremos nosotros mismos con un paño limpio que tengamos previamente preparado. Nuestra perra cogerá después a su cachorro para darle de mamar o en su defecto, será el mismo cachorro el que acuda a la mama de la perra.
Cuando todos los cachorritos hayan nacido, simplemente debemos procurar que estén cómodos con su madre. Existen camadas que son muy grandes y los cachorros más pequeños se quedan sin mamar, pues lo podemos colorar, lo más próximo a una mama, ya por el olor este la identificará y comenzará a mamar.
Garantizar la lactancia en las primeras 36 horas en fundamental en la salud futura de tus cachorros. En ocasiones las perras se comen la placenta y restos del parto, es algo muy normal y natural, ya que contiene una gran cantidad de nutrientes que nuestra perra necesita.
Si durante el parto apreciamos que algún cachorro nace muerto o muere, debemos retirarlo. Si apreciamos alguna complicación en el parto, cómo por ejemplo la presencia de sangre de color negro o muy oscura y mal oliente, debemos avisar al veterinario con urgencia.
¿Cuantos cachorros puede tener una perra?
Es imposible determinar cuantos cachorros va a tener una perra embarazada, ya que dependiendo de su tamaño, raza, número de montas que se le ha realizado, antecedentes de partos anteriores y salud puede tener dos, tres o incluso diez cachorritos en una misma camada. No te asustes si son más, hay casos documentados en los que en una sola camada se dan hasta quince perritos.
Aunque nuestro veterinario si que puede indicarnos con precisión el número exacto de cachorros, ya que gracias a las ecografías rutinarias que debe realizar a nuestra perra, podrá verlos y contarlos. Si el número de cachorros es superior al número de perritos que puedes tener, debes ir buscándoles casas para cuando cumplan dos o tres meses y puedas separarlos de la madre.
Cómo cuidar a una perra y a sus cachorros después del parto
Los cachorros deben estar mamando de su madre hasta cómo mínimo los dos meses de edad, así que nuestras labores con ellos se basaran en velar por su comodidad e higiene.
Poner toallas o sábanas limpias periódicamente, limpiar sus excrementos y orinas, etc…
A nuestra perra que acaba de dar a luz, debemos darle un alimento específico para perras lactantes. Podemos encontrar este tipo de alimentos en cualquier clínica veterinaria y son altamente recomendables, ya que contienen muchos nutrientes esenciales para la lactancia y para que nuestra perra recupere fuerzas.
Sería recomendable además estar al tanto de la temperatura de nuestra perra en las primeras horas posterior al parto. Es un procedimiento muy sencillo, con solo tocar su morro verás… si lo tiene caliente, pues es fiebre., pero en la mayoría de los casos no presentará fiebre.
La fiebre se produce en algunas ocasiones cuando se han quedado restos de membranas en el interior de tu perra, entonces deberás llamar a tu veterinario en estos casos. Hay que evitar que personas extrañas, que nuestra perra no conozca, se acerquen a ella o sus cachorros, su instinto protector puede aflorar y coger una aptitud defensiva.
Por lo demás, será el veterinario quien te de las pautas a seguir en función del estado de los cachorros. Recuerda elegir unos bonitos nombres para tus cachorros y darles todo el cariño que se merecen. Para ellos tú también eres parte de su familia, no los decepciones.