Conocer los cuidados de un perro ciego es esencial si tienes un compañero canino con esta limitación, ya sea ciego de nacimiento o que haya perdido la vista debido a una enfermedad.
A continuación, descubrirás cuáles son las precauciones que debes de tener en cuenta en el hogar, así como también la atención especial requerida durante los paseos y otros consejos esenciales para brindarle a tu perrito una vida feliz.
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¿Cómo saber si mi perro es ciego?
La ceguera en perros puede presentarse desde el nacimiento, cuando existen malformaciones de origen genético en el ojo. En estos casos, el perro nace con una visión limitada que empeora con el paso del tiempo.
No todos los perros son ciegos de nacimiento, algunos pierden la visión a causa de la edad, mientras que en otros la ceguera es el resultado de diversas enfermedades, como glaucoma o atrofia progresiva de la retina.
En ambos casos, la mejor forma de saber si tu perro es ciego es observando su comportamiento. Estas son algunas de las señales de alerta:
- El perro se tropieza con los objetos.
- Le cuesta encontrar sus recipientes de alimento, incluso cuando los tiene frente a sí.
- Demuestra torpeza en ambientes oscuros.
- Tiene manchas en los ojos.
- Se mueve con precaución fuera de casa.
- Gira su cabeza repetidas veces cuando le llamas, pues le cuesta identificar dónde estás.
- Los ojos lagrimean con frecuencia.
- Ausencia de reflejo fotomotor.
¿Sospechas que tu perro es ciego? Acude a tu veterinario para confirmar este diagnóstico.
Cuidados para un perro ciego
Un perro que ha perdido la vista a raíz de una enfermedad se vuelve inseguro y miedoso al principio, es tu trabajo lograr que recupere la confianza y lleve una vida tranquila.
La ceguera en perros adultos implica que realices algunos cambios en la rutina del hogar para proporcionarle a tu perro un entorno seguro donde se sienta cómodo. Estos son algunos consejos para cuidar a un perro ciego:
Acondiciona el hogar
Las escaleras, los escalones, las barandillas, los maceteros y otros objetos, además de la piscina, pueden convertirse en un peligro para tu perro en su nueva condición. Bloquea el acceso a escaleras y cualquier sitio donde tu perro pueda tropezar y caer, existen diferentes puertas separadoras y vallas que son sencillas de instalar, incluso sin obra.
Coloca los maceteros y las mesas auxiliares recostadas de la pared, de esta forma, liberarás los pasillos y evitas que tu perro tropiece con ellos. Además, retira de su alcance cualquier objeto puntiagudo.
Cuando debas salir de casa, quizá sea necesario que restrinjas sus movimientos en la casa, para evitar que se lastime. Una opción es ubicar un espacio un poco amplio, pero alejado de objetos peligrosos, donde puedas instalar las mallas protectoras. De preferencia, este lugar debería ser donde mantiene su comida y su cama.
No cambies los muebles
Si tu perro ha quedado ciego, lo mejor es que no modifiques la distribución de los muebles y objetos del hogar. Es posible que se tropiece al principio con ellos, pero este proceso será más sencillo para él si los muebles permanecen en el mismo lugar que conocía.
En caso de que adoptes a un perro ciego, guíalo a través de la casa durante los primeros días, siempre utilizando una correa. Permite que olfatee a sus anchas y evita que la recorra solo hasta que se habitúe a la ubicación de los objetos.
Recuerda mantener en el mismo lugar los recipientes de agua y comida, así como la cama del perro. De preferencia, en un espacio de la casa donde no se sea perturbado por ruidos frecuentes.
Paseos seguros
La correa es fundamental para salir a pasear, de esta forma te aseguras de que permanezca a tu lado y te será fácil guiarlo.
En perros que no son ciegos de nacimiento, los paseos provocan ansiedad, es recomendable que lo acostumbres a su nueva condición paseando cerca de casa durante un par de semanas. A medida que lo notes más seguro, amplia el rango de las caminatas.
No permitas que otras personas acaricien a tu perro en la calle, podría asustarse y reaccionar de forma negativa. Antes de acariciarlo, háblale para que sepa que te acercarás. Realiza el paseo de forma pausada y establece una rutina en cuanto a los lugares, los olores familiares le brindarán tranquilidad.
Solo debes quitarle la correa y el arnés cuando te encuentres en una zona segura donde el perro responda a tu llamada, Si hay demasiadas personas o mascotas, evita dejarlo solo.
Estímulos positivos
A pesar de su ceguera, tu perro puede seguir jugando y relacionándose con otras personas o mascotas, siempre con la precaución de hablarle antes de acercarse. Dale oportunidades para seguir reuniéndose con personas y perros conocidos, así enriquecerás su vida.
Además de sus juguetes habituales, adquiere otros que permitan desarrollar aún más su sentido de audición, como pelotas con cascabeles o muñecos que emitan sonidos al presionarlos.
¿Y si mi perro es ciego de nacimiento?
Los cuidados de un perro ciego de nacimiento son similares a los que necesita un perro adulto, pero debes añadir algunos elementos.
Entrenamiento
El entrenamiento es importante para cualquier mascota, pero un perro invidente requiere especial énfasis en comandos destinados a su seguridad. “Quieto”, “espera” y “siéntate” te serán muy útiles para evitar que se aproxime a lugares peligrosos.
De igual forma, enseñarle a responder a su nombre y volver contigo cuando lo llamas, te dará confianza para llevarlo a parques.
Arnés para perros ciegos
El arnés para perros ciegos está compuesto por un chaleco y una barra metálica o plástica ubicada alrededor de la cabeza. Gracias a este artículo, evitarás que tu perro se golpee el rostro al tropezar. Es una buena opción cuando lo llevas a un lugar nuevo, como un viaje de vacaciones.
Juegos adecuados
Es obligatorio que un perro ciego de nacimiento cuente con juguetes que emitan sonidos, esta es la única manera de divertirse buscando objetos.
Si tienes otras mascotas en casa, considera la posibilidad de colocarles un cascabel en los collares, para que tu perro invidente pueda ubicarlos con facilidad y no sobresaltarse cuando se acerquen a él.
Establece una rutina
La rutina es imprescindible para la vida de los perros, los ciegos no son la excepción. Establecer un horario para las comidas, los juegos, los paseos y el descanso, le darán tranquilidad a tu perro.
Evita la sobreprotección
Cuidar a un perro ciego no significa que debas sobreprotegerlo. Con el entrenamiento adecuado, los cuidados en el hogar y durante los paseos, y mucho cariño, tu perro será capaz de desarrollarse como cualquier otro y llevar una vida normal.
Con respecto a la alimentación, perros ciegos adultos o cachorros pueden llevar la misma dieta que otros canes, teniendo en cuenta su edad y raza (pequeños, medianos, grandes). De igual forma, acude al veterinario para una revisión anual o cuando notes un cambio de comportamiento.