Estos pequeños canes son la perfecta compañía para quienes viven solos, ya que son sumamente cariñosos y se adaptan a cualquier entorno siempre que no tengan competidores en casa. Se les suele confundir con los Yorkshire terrier, con los que guardan parentesco, pero los silky australianos son más pequeños y tienen el pelo más largo.
Muy populares en los países anglosajones, fueron creados para controlar las plagas de roedores. Pertenecen a la familia de los Terrier, pero algunas federaciones los incluyen en la categoría de perros toy. Si deseas conocer sus características y cuidados, continúa a nuestro lado. Te lo contamos todo a continuación.
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Características del Australian silky terrier
Esta raza se caracteriza por lucir un cuerpo más largo que alto. De hecho, el estándar exige que sea un quinto más largo que alto. Su cuerpo es compacto y sus extremidades fuertes. Su cabeza en forma de cuña alberga unos expresivos ojos almendrados, de tonos oscuros, una trufa negra y unas orejas erguidas, de inserción alta y con forma de V.
¿Cómo es el carácter del Australian silky terrier?
Estos pequeños terrier australianos son obstinados, activos y muy dóciles. Les encanta ser el centro de atención y complacer a los suyos. Disfrutan de la compañía humana, así como de los juegos con los niños. Eso sí, una socialización temprana contribuirá a que de adultos no sean mordedores por timidez.
Por su carácter territorial no toleran convivir con otras mascotas y con los extraños se muestran distantes como buenos perros guardianes. Son muy afectuosos con su familia y no llevan bien quedarse solos mucho tiempo. Si no le dedicas tiempo a diario para jugar se volverá destructivo por aburrimiento.
¿Qué cuidados requiere el Australian silky terrier?
Estos canes se adaptan a la perfección a cualquier tipo de hogar, tanto si es un pequeño apartamento de ciudad como una casa rural. Su mantenimiento no exige excesivos cuidados a excepción de un mínimo de actividad física a diario y del cepillado, también diario.
Para mantener su manto impecable deberás bañarlo cada 15 días y llevarlo a la peluquería cada 2 meses para que le corten el pelo. Los champús de aguacate y avena prevendrán que su piel se reseque mientras que el consumo de piensos enriquecidos con ácidos grasos Omega 3 y 6 y vitaminas favorecerá el brillo de su pelo.
Como terrier que es sus dientes son propensos a acumular placa y a desarrollar enfermedades como la gingivitis. Por tanto, tu primera opción dietética debe ser el pienso seco frente a la comida húmeda. Si tienes dudas, consúltalo con tu veterinario. Por su diminuta constitución son vulnerables a los cambios de temperatura, sobre todo, al calor.
Historia de la raza
Oriundos de Australia, los silky terrier son fruto del cruce del Australian terrier y del Yorkshire terrier, importado de Inglaterra. Con dicho cruce se pretendía obtener un perro de complexión más fina y pequeña que la del Yorkshire, de temperamento más dulce que este y con cualidades para la caza.
De hecho, en sus orígenes fue concebido para cazar roedores. Sin embargo, pronto se hizo popular en los países de habla inglesa como animal de compañía, dado su carácter afectuoso y dócil. En 1907 fue fijado su estándar.
Curiosidades del Australian silky terrier
En su génesis fue llamado Sydney, pero pronto cambiaron este nombre por el actual Australian silky terrier por resultar más explícito y comercial. En los países en los que está permitido se les suele recortar la cola, que de manera natural suele estar erguida y tiene forma de gancho.