Esta raza presume de su característico pelo rizado, semilargo y marrón, que junto a sus patas largas y a su porte esbelto la dota de un aire elegante. Son inteligentes y alegres, pero no son aptos para vivir en pequeños apartamentos lejos de la naturaleza y de los ríos o pantanos. Necesitan el contacto con la naturaleza y con el agua.
Aunque su origen es algo incierto, es probable que compartan linaje con los Poodle, los Barbat franceses y con los perros de agua portugueses. Todos ellos derivan de los Spaniel, una raza oriunda de las Islas Británicas y datada del siglo XI. Históricamente han sido empleados para la caza menor y como recuperadores de aves acuáticas.
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Características del perro de agua irlandés
Estos canes son medianos y de los más altos de los Spaniel. Su espalda es ancha y corta y sus extremidades concluyen en dedos palmípedos. El pecho es profundo y su aspecto atlético y fuerte. La cabeza está cubierta de una larga melena rizada, y los rasgos son marcados. Los ojos, de color ámbar o marrón, son pequeños y las orejas, largas y caídas.
¿Cómo es el temperamento del perro de agua Irlandés?
Son muy cariñosos y apegados a su familia. Sin embargo, aquel que le dedique más tiempo se convertirá en su favorito. Disfrutan mucho de los juegos con los niños y se llevarán bien con otras mascotas si han crecido juntos. Sin embargo, por su instinto de caza y recuperación no son una buena elección si tenemos mascotas de pequeño tamaño en casa.
Pese a ser muy activos, en el interior se desenvuelven con tranquilidad. Saben diferenciar el tiempo de juego de la vida en casa. Se muestran algo reservados con los extraños y siempre están alerta, características que los hacen excelentes como perros guardianes. Aunque son inteligentes les gusta hacer las cosas a su manera.
Por ello, no son una raza recomendable para las personas inexpertas en educar perros. Realizar sesiones cortas y apoyarte en el refuerzo positivo te facilitará la tarea de adiestrarlo. La socialización temprana resulta igualmente recomendable si van a convivir con otras mascotas.
¿Qué cuidados requiere el perro de agua Irlandés?
Para mantener el brillo de sus rizos deberás cepillarlo unas 2 o 3 veces por semana. Sus largas y caídas orejas son propensas a desarrollar infecciones. Para prevenirlas acostúmbrate a higienizarlas cada semana y sécalas a conciencia si se ha mojado. Eso sí, nunca utilices bastoncillos, ya que resultan muy contraproducentes.
Un mínimo de una hora de actividad física intensa al día es otro de los cuidados que estos perros reclaman para mantenerse sanos y equilibrados. De lo contrario, no dudarán en hacer de las suyas para advertirte de que se aburren. El juego compartido y disponer de un espacio propio son aspectos que también agradecen.
Al ser tan activos necesitan una dieta de calidad que les provea de los macronutrientes esenciales para seguir dando rienda suelta a su energía. La presencia de ácidos grasos Omega 3 y 6 en su alimentación es muy aconsejable a fin de proteger la salud de su piel y de su pelo. Los condroprotectores harán lo propio con sus articulaciones.
Historia de la raza
El origen de esta raza es algo impreciso. Se cree que provienen de los perros persas que llegaron a Irlanda a través de España. El primer perro de agua irlandés nació en 1834 y se llamaba Boatswain. Pertenecía al criador irlandés Justin McCarthy. Sin embargo, no hay constancia del cruce que realizó para crear la raza.
Hacia el año 1870 comenzaron a exportarse a EE.UU. País en el que pocos años después se convirtió en una raza muy codiciada por sus cualidades para la caza, la natación y como guardián, tanto de personas como de propiedades.
Curiosidades del perro de agua irlandés
Apenas pierden pelo y, por ello, algunos afirman que son una raza hipoalergénica. Aunque su manto es de color hígado con la edad puede mostrar manchas blancas. Su cola fina y oscura, llamada de rata o de látigo, es junto a su pelo rizado su seña identitaria más evidente.