Si estás interesado en la dieta BARF para tu perro, es posible que te preguntes cómo hacer la transición de la comida seca o pienso, a la dieta BARF de la manera más efectiva. La transición a la dieta BARF es un proceso que puede ser rápido o gradual y que requiere paciencia, atención y planificación para garantizar que tu perro tenga una transición suave y segura.
En este artículo de SoyunPerro, te proporcionamos algunos consejos y pautas útiles para hacer una transición de forma correcta, para que tu perro disfrute de todos los beneficios de la comida natural BARF.
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¿Cambio de alimentación brusco o paulatino?
Debemos valorar a cada perro de forma independiente para saber cuál es la mejor forma para introducir la comida natural en su alimentación diaria.
Cachorros
Si nuestro cachorro no tiene problemas gastrointestinales ni patologías relacionadas con la alimentación, podemos realizar un cambio de alimentación «brusco» o rápido, es decir, comenzar a darle comida natural de un día para otro (dejando el pienso por completo).
Por contra, si nuestro cachorro tiene digestiones sensibles, problemas gastrointestinales o patologías relacionadas con la alimentación, debemos hacer una transición progresiva.
Adultos
Los perros adultos que llevan un largo periodo de tiempo comiendo alimentos secos (pienso), necesitan una cambio progresivo para insertar la comida natural en su dieta, debido a que su microbiota intestinal tiene que adaptarse.
Cómo hacer una transición rápida a la comida natural
Simplemente comenzaremos el día dando comida natural a nuestro perro, respetando el número de tomas y la cantidad de comida que precise diariamente. Dejando por completo la comida seca, no debemos cometer el error de mezclarla ni alternar tomas (comida húmeda/comida seca).
Recuerda que la comida natural contiene mucha agua, ya que no está deshidratada como la comida seca. Queremos decir que si tu perro come 300 gramos al día de comida seca, seguramente necesite unos 600/900 gramos de comida húmeda al día (debes calcular la cantidad adecuada o pedir asesoramiento).
Cómo hacer una transición progresiva a la comida natural
Los perros acostumbrados a la alimentación seca, con digestiones sensibles o patologías relacionadas con la alimentación o el sistema digestivo, precisan de una transición gradual para evitar cuadros gastrointestinales.
Para ello comenzaremos sustituyendo la primera toma del día, por comida natural y manteniendo el resto de tomas, con comida seca. Esta comida natural debe ser «dieta blanda«, para que la asimile bien. Mantendremos esta pauta entre dos y cuatro días.
Luego añadiremos también la segunda toma del día con comida húmeda, dejando solamente la última o dos últimas tomas (dependiendo de si tiene 3 ó 4 tomas) con alimento seco. Mantendremos esta pauta otros dos o tres días, para finalmente realizar todas las tomas con comida natural.
Una vez hayamos realizado la transición, podemos dejar la dieta blanda para comenzar a utilizar diferentes recetas de comida natural elaboradas con proteína animal de calidad como puede ser el pollo, el pavo, el salmón o el buey (si quieres recetas ya elaboradas, puedes encontrarlas en páginas de alimentación natural como Dogfy Diet).
Los probióticos pueden ayudarte en la transición
Los probióticos son bacterias beneficiosas que viven en el intestino y que pueden ayudar a adaptarse mejor a una alimentación natural. Existen alimentos probióticos totalmente naturales que son aptos para perros, los cuáles podemos insertar en su alimentación incluso algunas semanas antes de comenzar con la alimentación natural.
Algunos de estos alimentos son:
- Yogur natural
- Kéfir
- Chucrut
- Micro algas
Bastará con una cucharadita al día para perros de tamaño medio.
Observa las reacciones de tu perro
Durante la transición, es importante observar de cerca a nuestro perro y prestar atención a cualquier signo de problemas digestivos o cambios en su comportamiento. Si notas cualquier problema, debes reducir la cantidad de alimentos frescos que le estás dando a tu perro y aumentar la cantidad de comida seca hasta que su sistema digestivo se adapte.
Algunos signos de problemas digestivos pueden incluir diarrea, vómitos, letargo, pérdida de apetito o cambios en el comportamiento.
Asegúrate de que tu perro reciba una nutrición equilibrada
Es importante recordar que la dieta BARF no consiste sólo en alimentar a tu perro con alimentos naturales, sino en proporcionarle una nutrición completa y equilibrada. Asegúrate de que los alimentos que le estás dando a tu perro contengan todos los nutrientes que necesita, incluyendo proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales.
Puedes hablar con un veterinario o nutricionista canino para asegurarte de que estás proporcionando a tu perro una dieta equilibrada y adecuada. También puedes optar por comprar la comida BARF ya preparada y así asegurarte de que recibe todos los nutrientes necesarios.