El Black and Tan Coonhound es una raza perfecta para quienes disfrutamos de las actividades al aire libre. Su tamaño es mediano y su carácter simpático, con una mirada triste que siempre genera ternura.
Antes de adoptar un perro de esta raza, necesitamos conocer sus características, cuidados y posibles enfermedades que puede padecer. ¿Estás preparad@? ¡Descubramos todo sobre el «perro negro y fuego, cazador de mapaches»!
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Historia de la raza Black and Tan Coonhound
Esta raza aparece a partir de la necesidad de cazar mapaches, principal fuente de carne y comercio tras la revolución americana. Entre sus ancestros, se encuentra los perros Foxhound y los Bloodhound.
El objetivo era que la nueva raza pudiera acceder a los escondites de los mapaches, además de cazar durante la noche. A partir de 1945, la American Kennel Club reconoció al Black and Tan Coonhound como raza legítima.
Características del Black and Tan Coonhound
La raza de perro Black and Tan Coonhound es mediana y de cuerpo proporcionado. Con patas y la cola largas.
El hocico es también alargado, con labios caídos, terminado en una trufa siempre negra. Las orejas son delgadas, largas y caen hasta el cuello.
Los ojos son redondos y de mirada triste, bastante adorable. El color casi siempre es avellana o castaño oscuro.
El pelaje el corto, brillante y abundante. La única coloración de la raza incluye un manto negro carbón acompañado de zonas rojiza o fuego, sobre todo en las patas y parte del hocico.
¿Cómo es el carácter de un Black and Tan Coonhound?
El carácter de la raza es muy especial. Aunque adora las actividades al aire libre, el Black and Tan Coonhound es dócil y cariñoso, ideal si no sabemos controlar un perro demasiado dominante.
Adora estar con otras personas y mascotas, pues su personalidad extrovertida disfruta de los compañeros de juego. Podemos llevarlo al parque a jugar con otros perros, le encantará estar en compañía. Algunos ejemplares pueden ser reservados con los extraños. Mientras es cachorro, una de nuestras tareas principales es fomentar la socialización.
Es un perro obediente y bien portado. Además, su carácter tranquilo es perfecto para familias con niños en casa.
Cuidados para un perro Black and Tan Coonhound
Debemos cepillar su pelaje una o dos veces por semana, utilizando un cepillo adecuado para el pelo corto. Esta raza muda el manto dos veces al año; en esa época, podemos aumentar la frecuencia del cepillado para evitar que el pelo muerto se acumule en casa.
Las uñas del Black and Tan Coonhound crecen con rapidez. Ya sea de forma casera o en la peluquería canina, conviene que las cortemos con regularidad; de lo contrario, resultarán molestas cuando nuestro perro corre.
El ejercicio es indispensable para la buena salud, y también para estrechar lazos con la familia. Salir a caminar, jugar en el parque o el jardín y realizar ejercicios de búsqueda son algunas de las divertidas actividades que podemos realizar con nuestro perro Black and Tan.
No conviene dejarlo desatendido o solo durante muchas horas, pues le encanta estar con la familia. De lo contrario, se aburrirá y ladrará mucho, o abrirá agujeros en el jardín.
Enfermedades comunes en la raza
Esta raza robusta presenta pocos problemas de salud. Con los cuidados adecuados y una visita periódica al veterinario, evitaremos que enferme.
A pesar de esto, tiende a sufrir algunas dolencias:
- Displasia de cadera: se trata de una enfermedad hereditaria. Es provocada por una malformación en los huesos que unen la cadera con el fémur. Si nuestro perro la sufre, experimentará dolor y cojera. Es posible mejorar la condición con atención veterinaria, dieta y ejercicios adecuados.
- Cataratas: consiste en la aparición de una membrana opaca en el cristalino, una de las partes del ojo. Notaremos una mancha azul o blanca. La enfermedad es degenerativa y muchos perros pueden someterse a cirugía para frenar al avance.
- Hipotiroidismo: aparece cuando la tiroides funciona mal. Provoca agresividad, cansancio, obesidad, descoordinación y parálisis facial.
- Infecciones auditivas: las orejas de nuestro perro son hermosas, pero su tamaño y forma son perfectas para que aniden bacterias.