Cuando separar un cachorro de la madre

Existen diferentes opiniones profesionales sobre cuando es el momento ideal para separar un cachorro de la madre, sin ocasionar daño a ninguno de los dos. Obviamente el cachorro puede ser más vulnerable, pero la madre también puede padecer daños psicológicos si no se hace correctamente.

Un factor clave para saber si el cachorro puede ser separado de la madre que lo amamanta, es después del destete. Aunque antiguamente se pensaba que la mejor fecha para separarlos era entonces, diferentes estudios realizados con prácticas reales revelan que es un error.

¿Qué es el destete y cuando sucede?

Cuando nuestra perra da a luz, es decir, cuando pare a sus cachorros, estos nacen sin dientes por lo que no pueden comer nada sólido. Se alimentarán durante seis u ocho semanas de las mama de la madre, mamando leche.

El destete es el nombre que se le otorga al momento o acción de terminar el periodo de alimentarse mamando. Es cuando los cachorros comienzan a comer alimentos, dejando de mamar progresivamente.

Cuando se produce el destete, se debe poner a disposición de cachorro una alimentación específica para cachorros, la cuál podemos mezclar con un poquito de agua templada para que las croquetas queden más blanditas para ellos.

Algunos perros comienzan a destetarse a las seis semanas y otros a las siete, aunque entre la sexta y la octava semana es cuando lo hacen la mayoría. El destete es progresivo, deben seguir mamando unos días a la par de probar su alimentación nueva (pienso).

¿Cuando se deben separar a los cachorros de la madre?

Si se trata de una urgencia por el motivo que sea, lo ideal es esperar cómo mínimo hasta los tres meses de vida del cachorro. Hay quien separa a los cachorros del a madre después del destete, pero no es algo recomendado en absoluto.

En realidad lo ideal es esperar a que el cachorro se convierta en un adolescente, e ir haciendo una separación progresiva. Es decir, cuando el cachorro tenga unos seis meses de vida, es cuando se le debe, poco a poco, ir separando de la madre.

Para realizar una separación progresiva basta con llevarse al cachorro a separar sin la madre durante algunas horas, de forma que se acostumbre a las salidas sin la madre. Ir aumentando ese tiempo hasta que sea algo habitual, entonces el cachorro, ya no tan cachorro, estará preparado.

Los cachorros necesitan a sus madres no sólo para alimentarse mientras no tienen dientes o se han destetado, sino para aprender actuar y comportarse en la sociedad que los rodea. Socializar a un cachorro es la parte más importante de toda su educación. Y nadie mejor que su propia madre, para enseñarle a descubrir la vida, su entorno y cómo comportarse.

Lamentablemente la realidad es que pocas veces se mantienen a los cachorros junto a la madre hasta que tienen seis meses de vida, lo habitual es separar al cachorro de la madre cuando tienen tres meses de vida.

Con tres meses de vida se supone que el cachorro puede soportar la separación de la madre y sobrevivir, aunque su educación y estado emocional pasará a ser exclusivamente nuestra responsabilidad. Así pues, lo ideal es mantenerlos bastante tiempo juntos, lo habitual es separarlos a los tres meses de vida y lo desaconsejado es hacerlo antes de los tres meses de vida del cachorro.

Consecuencias por separar un cachorro de la madre

Cuando la separación se produce en cachorros de menos de tres meses de vida, estos cachorros pueden desarrollar miedos y traumas ocasionados por la temprana separación. Además deben ser alimentados con leche especial que debemos comprar en clínicas veterinarias y debemos darles unos cuidados constantes.

Los cachorros no pueden beber leche de vaca porque es nociva para ellos, tampoco pueden masticar hasta que no les salgan los dientes. Por eso debemos evitar por todos los medios, separar a un cachorro de la madre antes de que cumpla tres meses de vida.

Si hemos esperado a que el cachorro tenga tres meses, las consecuencias por la separación serán el estrés de la propia situación y el cambio de vivienda. Por eso debemos prestar una especial atención a los cachorros, principalmente durante sus primeras semanas en casa.

Para comenzar a educar a un cachorro debemos esperar a que cumpla al menos un año de edad, pero mientras tanto, podemos ir enseñándole trucos, socializandolo y preparando la base / cimientos para una educación adecuada.

No sólo los cachorros pueden sufrir mucho si son separados prematuramente, la madre también puede sufrir estrés psicológico o experimentar un embarazo psicológico prolongado. Es una madre que pierde a sus hijos antes de tiempo, es normal que sufra. Por eso insistimos en mantener el máximo tiempo posible a los cachorros con la madre, porque es lo natural y lo recomendable.

Jose Antonio Ramos

Adiestrador canino, titulado en el centro de educación canina Larcan. Técnico en modificación de conducta, ampliando estudios en etología canina. Ilusiuonado por compartir conocimientos y experiencias con los lectores de Soyunperro.

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