Si te gusta el carácter apacible del Golden Retriever pero prefieres un perro que no suelte tanto pelo, el Goldendoodle es tu compañero ideal. Por este motivo es idóneo para todas aquellas personas que tienen alergia.
Suelen ser elegidos como perros de compañía en los hogares donde hay niños, ya que son muy cariñosos, aunque también son adecuados para ayudar a las personas que sufren algún tipo de discapacidad visual. Además son muy inteligentes, aprenden órdenes sin apenas esfuerzo.
Los hay de diferentes tamaños: grandes, medianos y minis. Esta variable dependerá en gran parte del peso de sus padres, aunque no debemos guiarnos única y exclusivamente por ella. Si quieres conocer las principales características del Goldendoodle no dejes de leer este artículo.
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El carácter y el comportamiento del Goldendoodle
Esta raza de perro es especialmente sociable, dulce y cariñosa. Les encanta estar rodeados de personas e incluso de otros animales, por lo cual no son precisamente buenos perros guardianes: se harán amigos de los ladrones en lugar de ahuyentarlos.
Suelen presentar problemas de comportamiento si sus dueños los dejan bastante tiempo solos. También son fieles, leales y obedientes, lo cual los convierte en perros fáciles de entrenar si reciben una buena formación.
Los Goldendoodles tienden a roer todo aquello que encuentran por su camino, por lo que habrá que entrenarlos correctamente para quitarles esta manía. También poseen un gran olfato, así que podemos jugar con ellos a esconder ciertos objetos para que los encuentren.
¿Cuáles son sus características físicas?
Podemos encontrar Goldendoodles de diferentes colores: negro, beige y chocolate, aunque los más comunes son de color crema y oro. Su pelo es largo, grueso y rizado, por lo tanto debemos cepillarlo constantemente, de esa manera evitaremos que se enrede y se formen nudos.
Como se ha mencionado anteriormente su tamaño puede variar: los más grandes pesan entre veinte y treinta kilos, los medianos pesan entre catorce y veinte kilos, y los minis pueden pesar hasta seis kilos. Las hembras suelen ser cinco centímetros más pequeñas que los machos.
Son perros que poseen mucha energía, por lo cual debemos darles grandes paseos o incluso salir a correr con ellos. A algunos Goldendoodles les encanta nadar. Esta capacidad solo la podrán desarrollar con un buen entrenamiento.
Cuidados necesarios para un Goldendoodle
Su esperanza de vida ronda los quince años y durante todo ese tiempo suelen gozar de buena salud, aunque debemos estar especialmente atentos cuando nuestro perro llegue a una edad avanzada, ya que puede sufrir displasia de cadera. También hay que tener cuidado con sus ojos y sus oídos. Los Goldendoodles son propensos a padecer enfermedades en estas zonas, por lo que es imprescindible mantenerlas muy limpias para evitar cualquier tipo de infección.
Los Goldendoodles adultos tienen que comer un par de veces al día, una por la mañana y otra por la noche. Su comida debe tener un alto contenido proteico, de esta forma nos aseguramos de que reciben toda la energía que necesitan.Además deben descansar después de las comidas, para evitar una torsión de estómago.
Nuestro perro deberá comer pienso especial para cachorros hasta el primer año de edad, a partir de ahí podemos introducirle la comida de adultos. Evidentemente tendremos que tener un recipiente lleno de agua para evitar que se deshidrate, sobre todo durante el verano.
Cómo educar a un Goldendoodle
Aunque sea un perro muy inteligente, y por lo tanto fácil de adiestrar, debemos tener paciencia y recompensarlo cada vez que realice correctamente la orden que le hemos dado. Podemos premiarlo con chucherías especiales para perros, de esta manera asociará ambas cosas.
Es mejor estimular a tu perro a través de premios que castigarlo cuando no acata una orden. Aunque este último método parezca efectivo, lo único que conseguiremos es que nuestro compañero peludo nos tenga miedo. Además, el castigo físico puede hacer que el perro sufra episodios de ansiedad al reprimir su ira, lo cual podría desembocar en un comportamiento agresivo en el futuro.
La constancia es la clave de cualquier entrenamiento. No tires la toalla si tu perro no te hace caso durante los primeros días, a algunos les cuesta más trabajo que a otros, pero si eres perseverante e insistes seguro que consigues buenos resultados.
Conoce los orígenes de esta raza
Sus orígenes se remontan al año 1992, momento en el cual se cruzaron las razas Golden Retriever y Caniche con el objetivo de obtener perros guías capaces de ayudar a las personas invidentes.
Este bello perrito fue concebido en Estados Unidos y Australia. Su porte elegante hizo que los ingleses lo bautizaran como “el perro de diseño”. El carácter sociable de este simpático animal hizo que posteriormente se convirtiera en el compañero ideal de grandes y pequeños.