Quimioterapia en perros

La quimioterapia es un buen tratamiento paralelo a algunas cirugías de tumores, así como tratamiento único en otros tantos. Y es que el cáncer no solo afecta cada vez más a los humanos, sino también a nuestros amigos peludos.

Ante este diagnóstico, es normal que nos sintamos desconcertados y nos empiecen a surgir multitud de dudas. Por eso, desde Soyunperro responderemos las dudas más frecuentes relacionadas con el cáncer en perros y la quimioterapia.

¿Qué es la quimioterapia?

Se puede definir como el uso de fármacos citostáticos (paralizan el rápido crecimiento celular) en el animal con el objetivo de mantener controlado el crecimiento del tumor (prevenir metástasis, reducir el tamaño de la masa, hacer desaparecer la misma…). Intentando así mantener la calidad de vida y la supervivencia del animal.

¿Cuando es recomendable aplicar quimioterapia a un perro?

Como antes hemos señalado, la quimioterapia se utiliza para tratar algunos de los tumores, pues los pilares del tratamiento oncológico son la cirugía, la quimioterapia y la radioterapia. En líneas generales, la mejor opción es la cirugía siempre que sea factible, pero contemplando la edad, capacidad de recuperación y calidad de vida, debemos elegir uno, otro o la combinación de varios tratamientos.

Para saber si el cáncer del perro es tratable mediante quimioterapia primero se deben realizar exámenes y/o pruebas complementarias para conocer dónde se encuentra el tumor, qué tamaño tiene, su etapa de desarrollo, así como los factores descritos en el anterior párrafo.

La quimioterapia es aconsejable en determinados casos:

  1. Cuando no hay opción de operar al perro o los tumores no pueden extirparse con todos los márgenes mediante cirugía.
  2. Si hay riesgo de metástasis hacia órganos próximos o hay metástasis instalada y se quiere intentar prolongar la vida en la medida de lo posible mientras tenga calidad de vida.
  3. Después de eliminar el tumor para acabar con todas las células malignas posibles que puedan haber quedado en el organismo del perro.

¿Cómo funciona la quimioterapia?

El cáncer suele expandirse rápidamente por todo el organismo, pues las células cancerígenas se dividen más rápido que el resto (alto grado mitótico). Para reducir o frenar este proceso se utiliza la quimioterapia.

Estos fármacos antineoplásicos penetran en las células diana mediante difusión. Una vez en la célula, sus puntos de acción son el ADN, enzimas, membranas y microtúbulos. Esta dosis se calcula en función de la superficie corporal del paciente (m2), y en ocasiones en función del peso (kg).

Sin embargo, tiene efectos secundarios como la afección también de las células normales ya que estas pasan por el mismo ciclo celular que las células cancerígenas (no a la misma velocidad). Así pues, las poblaciones celulares más afectadas con más frecuencia son:

  1. Médula ósea
  2. Epitelio gastrointestinal
  3. Folículos pilosos.

La dosis y la frecuencia de las sesiones así como el tipo de quimioterapia, deberán ser determinadas siempre por un profesional veterinario tras evaluar el caso particular del perro. Normalmente la quimioterapia es administrada vía oral o intravenosa.

Efectos de la quimioterapia en nuestro perro

Algo que debes tener muy presente es que la quimioterapia en perros puede tener efectos secundarios dependiendo del quimiostático utilizado así como su vía de administración. En algunos casos, tras varias dosis de un fármaco puede aparecer trombocitopenia (falta de plaquetas). En esta situación la retirada del fármaco por riesgo de sangrados está justificada.

Los efectos secundarios frecuentes son:

  • Síndrome de Cushing
  • Toxicidad en médula ósea
  • Neutropenia (tipos de glóbulos blancos neutrófilos disminuidos).
  • Anemia

También debes ponerte en contacto con el veterinario ante cualquier cambio de comportamiento.

Consejos para afrontar la quimioterapia canina

Nuestro objetivo durante todo el tratamiento debe ser ofrecer a nuestra mascota la mejor calidad de vida posible. A pesar de los numerosos posibles efectos secundarios que a simple vista puede parecer que la quimioterapia tiene, está bastante estudiada y avanzada a día de hoy, ofreciendo gran rango de opciones en lo que a medicamentos se refiere.

Una actitud positiva ante la situación puede ayudar a nuestra mascota, ya que todas nuestras emociones se transmiten a ellos. Así que es importante que te asegures de que tu amigo peludo se siente feliz y querido pese a su enfermedad. También es importante que tenga un lugar cómodo en el que descansar sin estresarse.

Por lo que animo a probar este tipo de terapia siempre que el veterinario lo considere, ya que en determinados casos es mejor intentarlo que pensar en lo que hubiese pasado si no lo hubiéramos hecho.  En caso de que el estado del perro llegue a deteriorarse demasiado, es posible que haya que tomar una decisión dura y pensar si es necesario sacrificar a nuestro perro (algo que solo un veterinario debe proponer).

Vet. Miguel Fraga García-Yanes

Graduado en veterinaria en la universidad Alfonso X El Sabio (Madrid). Colegiado 8917 en Madrid. Ampliando conocimientos en cirugía de tejidos blandos, endoscopia y dermatología. Interés por los animales desde muy pequeño y en compañía de Max desde hace 11 años.

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