Heterocromía en perros (un ojo de cada color)

¿Existe algo más curioso que el hecho de que tu perro tenga un ojo de cada color? Para muchos es considerado un defecto genético, pero lo cierto es que la heterocromía no compromete en absoluto su visión.

Algunas razas poseen una mayor predisposición a desarrollarla y existen varias leyendas en torno a ella. Si deseas ahondar en las causas y particularidades de esta condición oftalmológica , desde Soyunperro te lo explicamos todo.

¿Qué es la heterocromía canina?

La heterocromía del iris es una condición física más recurrente en los gatos que en los perros, aunque también se han registrado casos en caballos e incluso en humanos.

La existencia de un ojo azul y otro marrón está íntimamente ligada a la producción de melanina, que es la sustancia encargada de dotar de pigmento a la piel, al pelo y a los ojos.
Por tanto, en función de la coloración y cantidad en el iris de las células protectoras de esta melanina (los melanocitos) tendrá lugar o no este curioso atributo ocular.

La herencia genética resulta decisiva en su desarrollo, dado que el denominado gen merle es el causante de la ausencia de pigmentación propia de los ojos azules, así como del pigmento mariposa en la nariz de los canes.

Este gen también expresa heterocromía parcial, mostrando un ojo pardo, un ojo azul y dentro de este azul, pigmentación parda, dicho de otra forma, el gen diluye la melanina, que es la responsable de la pigmentación en ojos, piel y pelaje.

Existen razas características que expresan con mayor frecuencia el gen merle (ojos multicolor), varias tonalidades en el mismo iris. Así mismo, este gen es el responsable de las manchas blancas alrededor de los ojos, del albinismo y de que en la raza Husky siberiano, pese a ser una raza con pelaje no merle, prosperé la heterocromia parcial.

Tipologías y causas de la heterocromía en perros

La heterocromía iridium se clasifica en total y parcial. La total es más habitual en razas como el pastor Australiano, el Husky y el Catahoula leopard. Se distingue de la parcial en que la totalidad del iris es de un color distinto al del otro iris (uno azul y el otro pardo). En los pastores ovejeros Australianos debemos añadir a las tonalidades azul y parda, la ambar.

La parcial, por su parte, consiste en que uno de los iris presenta fragmentos de la coloración del otro ojo, siendo más usual en el Corgi Galés de Pembroke o en el Border Collie, Husky Siberiano, Pastor Asturiano entre otros.

El pastor ovejero australiano por su parte lo muestra totalmente pardos, azules o ámbar, aunque también una variación o combinación de los mismos.

En cuanto a los agentes desencadenantes cabe señalar que esta condición oftalmológica puede deberse a causas congénitas y, en consecuencia, hereditarias o a causas adquiridas, entre las que se incluyen ciertas enfermedades (glaucoma, uveítis o neurofibromatosis), lesiones causadas por cuerpos extraños, la exposición a ciertos medicamentos o las hemorragias.

A su vez, dentro de las causas hereditarias cabe añadir el síndrome de Waardenburg. Se trata de varias afecciones conjuntas que provocan sordera, así como pelo, piel y ojos claros. Suele ser más usual en los perros de pelaje blanco, como es el caso del Gran Danés arlequín y del Dálmata.

Debes saber que las causas congénitas no revisten gravedad ni cuidados especiales por tu parte. Sin embargo, las modificaciones de pigmentación acaecidas a lo largo de la vida de tu mascota sí que reclaman una visita veterinaria para determinar y atajar la lesión o patología que la generan.

¿Afecta a la visión del perro?

Cuando hablamos de heterocromía genética (de nacimiento), puedes tener la certeza de que esta cualidad física no va a interferir en la óptima visión de tu mascota. El estado de la retina y del nervio óptico son los únicos responsables de una buena o mala visión, el color del iris no atesora esta capacidad.

Existen algunas afecciones asociadas a la pigmentación, como el glaucoma pigmentario, en las que su detección solo se puede diagnosticar a través de un examen oftalmológico completo.

Debes controlar o restringir la exposición a la radiación de los rayos ultravioleta si tu perro posee despigmentados también sus párpados, ya que pueden ser más sensibles a la luz.

Un patología rodeada de leyendas

Desde hace muchos años esta condición ha alimentado multitud de leyendas que le confieren cierto misticismo. Para algunos el ojo pardo vigila la Tierra mientras que el azul hace lo propio con el cielo. Para los esquimales los perros con heterocromía son más veloces.

En definitiva, si tu perro tiene un ojo de cada color no debes preocuparte, ya que no requiere cuidados específicos ni implica que tu mascota vea mal. Simplemente, podrás presumir de contar con la compañía incondicional de un amigo único en el mundo.

Vet. Janet Siso Iglesias

Licenciada en Veterinaria en la Universidad Agraria de la Habana. Especializada en pruebas biológicas y control de calidad (Industria farmacéutica). Colaboradora en ONGs de protección animal.

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